Todo evento arcillero tiene su intercambio de piezas. Este año, la propuesta consistía en hacer cuanto triángulos de 9cm de base y 10cm de altura, para construir una pirámide. Cada persona entregaba cuatro, y recibía otros cuatro de personas diferentes.
Mis triángulos fueron la manera de quitarme de encima mi obsesión por el jardín Zen, al menos de momento, jijiji.
Ya con la idea en la cabeza y un par de prototipos, acabé de perfilar el diseño durante las vacaciones.
Ya en casa me puse manos a la obra y salieron los triángulos.
Y estos son los que recibí a cambio, dos venían de Finlandia, uno de Eslovenia y otro de Madrid.
Como veis, hice un triángulo de más, por si acaso, y al final fue bien, se lo envié a una chica que por motivos burocráticos no pudo venir al ECC. Al menos un pedacito del Euro Clay si pudo viajar hasta su casa.
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